Hoy hablamos del tema de pesar la comida, realmente es necesario, o ¿útil?, ¿Cuando, cómo y por qué hacerlo?
El texto que viene a continuación es una transcripción del vídeo ligeramente modificada para hacerlo más agradable a la lectura.
Vamos a hablar sobre si pesar la comida es una buena práctica o una mala práctica, así que si pesas la comida que comes, la has llegado a pesar o estás pensando en empezar a pesarla este video te interesa, por lo que vamos a por ello.
Pesar la comida puede tener sus aspectos negativos y sus aspectos positivos.
ASPECTOS NEGATIVOS
Entre los aspectos negativos tenemos que destacar el hecho de obsesionarse por la comida, las obsesiones no son buenas!
Al final si es verdad que si estamos pesando continuamente lo que estamos comiendo nos estamos obsesionando porque probablemente lo estamos pesando por el tema de las kilocalorías para saber cuántas estamos consumiendo, no pasarnos etc…
Pero que ocurre con esto, pues ocurre que claro si estamos todo el rato obsesionándonos por esto entonces al final la alimentación es lo que forma parte de toda nuestra vida, y no es una parte de ella.
Y en muchas ocasiones ni siquiera es necesario ponerse a pesar la comida aunque tengas un objetivo concreto
Por lo que realmente párate a pensar si realmente el estar continuamente pesando todo lo que comes gramo a gramo es útil o no es útil para ti porque yo he llegado a ver casos en los que si se pasa de por ejemplo 150gramos que es lo que querían comer ya se pone nerviosa esa persona aunque sean 152 153 147 y al final esas diferencias van a dar igual
Por lo que mucho cuidadito con obsesionarse
Además pongámonos en el caso que realmente si fuese útil el pesar la comida por un objetivo muy concreto, es muy muy tedioso empezar a hacerlo porque imagínate la situación de que realmente cada comida que tienes que comer tienes que pesarla antes al final eso va a resultar tedioso y va a ser algo que no podamos mantener a largo plazo y si no podemos mantenerlo a largo plazo significa que no es la mejor opción.
ASPECTOS POSITIVOS
Pero ojo os he dicho que puede tener sus aspectos positivos pero donde tiene esos aspectos positivos.
Pues puede tener su aspecto positivo como comienzo en un plan de alimentación concreto porque por ejemplo si nosotros estamos buscando un objetivo estético en el que si es verdad que necesitamos algo un pelín más concreto sí que está bien que sepamos aproximadamente las cantidades que estamos tomando.
Porque no es lo mismo que yo te diga que te tomes un plato de pasta con tomate y que uno coja y se sirva un plato gigantesco de a lo mejor 200, 300 gramos de pasta pesados en crudo frente a otro que lo que está haciendo es tomarse a lo mejor 80 o 100 gramos, entonces como nos puede venir bien en estas situaciones.
Pues si lo pensamos realmente en estas situaciones puede venirnos bien por el hecho de que asi podemos aprender a diferenciar cuando nos estamos acercando más a una cantidad o a otra, y entonces que ocurre con esto, que podemos adaptar nuestro ojo a esas cantidades de tal forma que si queremos conseguir nuestro objetivo y más o menos nosotros a ojo sabemos aproximadamente cuanto es la cantidad porque como os he dicho no importa que haya unos gramos arriba o unos gramos abajo incluso aunque fuesen 10, 20 gramos arriba o abajo no va a ser una diferencia abismal y entonces si es verdad que como ya tenemos el ojo hecho a todo aquello es mucho más sencillo el poder seguir ese plan para conseguir ese objetivo.
Además que otro aspecto positivo tiene, pues tiene el aspecto positivo de que en ocasiones lo que creemos es que no estamos comiendo mal sino que estamos comiendo mucho, entonces si durante una temporada muy cortita pesamos los alimentos nos daremos cuenta si nos estamos alejando mucho de una ración normal.
Por poner un ejemplo si una ración normal de un plato basado en el arroz fuesen 80 gramos de arroz pesado en crudo, a lo mejor nosotros cogemos y decimos ¿puede ser que yo no este comiendo platos demasiado grandes? Y entonces cogemos un día y lo pesamos y vemos que nosotros estamos tomando 160 gramos es decir estamos tomando 2 veces esa ración.
Que nos indica esto, nos indica que es verdad que la ración es grande, es decir somos una persona con apetito y hay que seguir otras recomendaciones o hay que buscar otras maneras para poder llegar al objetivo sin necesidad de pasarlo mal.
Porque claro lo que no podemos hacer tampoco es pasar directamente de esos 160 gramos a 80 gramos, sino que tenemos que buscar alguna manera de poder saciarnos de la misma manera y sin embargo llegar a esos objetivos.
A lo mejor cambiando ciertos alimentos, cambiando unos por otros o buscando distintas maneras que existen para que tengamos menos apetito o para que nos saciemos antes.
¿Qué nos ha quedado claro? Pues que pesar la comida puede ser interesante pero no es necesario, es decir, que si lo hacemos tiene que ser un corto periodo de tiempo y simplemente para hacer el ojo a las cantidades que tomamos habitualmente para saber si nuestros filetes de 200 o de 100 gramos, pero no para saber si son de 100 o de 115, esa es la mayor diferencia realmente que tenemos que ver cuando estamos empezando a pesar los alimentos y por eso mucho planes alimenticios si es verdad que se marcan las cantidades para que poco a poco te vayas haciendo a ellas.
Pero si por ejemplo en un plan alimenticio te pone una cantidad de 150 gramos no quiere decir que tengas que tomar 150 gramos exactos sino que te acostumbres a tomar una cantidad parecida a eso, y por supuesto si esas cantidades son mucho menores que las que tu estas tomando, entonces lo que tienes que hacer es buscar otras estrategias.
Por lo que espero que este vídeo os haya resultado de utilidad y que realmente ya empecéis a valorar porque a veces al principio se pide que pese la comida pero que a largo plazo no se debe hacer porque puede llegar a un problema de obsesión, y no queremos obsesionarnos no queremos!!