Este artículo pretende solo dar una visión general acerca de los edulcorantes como aspartamo, sacarina, sucralosa y otros muchos edulcorantes usados habitualmente para sustituir al azúcar, por internet vamos a encontrar información al respecto, unos dicen que son peligrosos y otros que son totalmente inocuos, pretendo dar mi opinión al respecto basándome en la literatura científica que he encontrado.
Como siempre ocurre cuanto más te adentras en un tema más puedes ahondar en él, y más cosas nuevas vas encontrando que quieres comprobar e investigar, pero eso lo dejaré para más adelante y voy a hacer todo lo posible por dar una visión global hoy, ya otros días hablaremos de temas o edulcorantes más particulares.
Normalmente el poder endulzante que tienen los edulcorante suele ser muy superior al del propio azúcar, pero gran parte de ellos son acalóricos, es decir que no aportan calorías, por lo que es la principal razón por la que se suelen utilizar, para intentar perder peso, además de esto también son recomendados cuando tenemos algún problema de resistencia a la insulina, o hemos llegado a tener diabetes, pero los mayores detractores de los edulcorantes lo son por el miedo al CÁNCER, suponiendo por ciertos estudios que puede provocarlo.
EDULCORANTES Y CÁNCER
Cuando hablamos del efecto cancerígeno de los edulcorantes, metiéndolos a todos en el mismo saco aunque cada uno tenga sus particularidades, pues sí, es cierto, son cancerígenos, pero igual que el sol tomado en exceso o que muchos alimentos y elementos cotidianos, pero ¿nos van a provocar cáncer?, en este caso la respuesta es no, y expongo por qué no a continuación.
En Europa para marcar el IDA “ingesta diaria admisible”, primero se obtiene otro número que es el NOAEL, este número es nivel sin efectos adversos observados, es decir, que incluso consumiendo el NOAEL aún no se encuentra ningún problema, este NOAEL lo dividen entre 100, y con eso nos marcan el IDA, pero de media las personas ni siquiera llegan al IDA se quedan por debajo de este, por lo que esos efectos cancerígenos que podrían tener superando el NOAEL quedan muy lejos de las cantidades que vamos a consumir.
Para que lo veáis más gráficamente, si yo tuviese una sustancia con un NOAEL de 100g, el IDA seria de 1g, y probablemente tú estarás consumiendo alrededor de 300mg, por lo que de 300mg hasta 100g de la sustancia que sea habría una gran distancia.
Así que podéis estar tranquilos, no vais a morir ni vais a provocaros cáncer por el consumo de edulcorantes para sustituir al azúcar, pero, ¿Esto quiere decir que no vamos a afectar a nuestra salud?.
EDULCORANTES Y MICROBIOTA
Cuando hablamos de microbiota estamos refiriéndonos al conjunto de comunidades de microorganismos que habitan en nuestro cuerpo, y puede que no lo sepáis pero es muy importante para nuestra salud.
Sabemos que una microbiota variada y correcta está relacionada con un mejor sistema inmunológico, mejores parámetros metabólicos, mayor tolerancia a la glucosa, y en general a un adecuado funcionamiento de nuestro organismo, mientras que una microbiota alterada puede repercutir negativamente en todos estos parámetros, e incluso contribuir al cáncer colorrectal.
Entonces sabiendo qué es, y sus beneficios, es algo que debemos tener en cuenta a la hora de decidir que es más o menos saludable, y parece ser que estos edulcorantes pueden estar afectando negativamente a ello.
Se ha observado que un consumo habitual de edulcorantes puede alterar nuestra microbiota de forma negativa, y esto traducirse en efectos adversos como una mayor resistencia a la insulina, comprometer nuestro sistema inmunológico predisponiéndonos a poder caer enfermos, y alterando el correcto funcionamiento del intestino en varios niveles.
En principio si es verdad que parece ser que muchos edulcorantes pueden retrasar el vaciado gástrico, algo que sería favorable en el control glucémico, pero estos beneficios se quedarían a un lado, cuando a largo plazo estamos alterando nuestro metabolismo, por esos cambios en la microbiota.
PARÁMETROS PSICOLÓGICOS DE LOS EDULCORANTES
Además de lo expuesto respecto a la microbiota hay otros parámetros que debemos tener en cuenta, y son los psicológicos, se ha expresado muchas veces la preocupación acerca de que el consumo de edulcorantes pueda provocarnos una menor saciedad, es decir, que tengamos más ganas de comer y aumentemos nuestra ingesta calórica, aunque parece que no es así, y que la tendencia a engordar de personas que suelen consumir bebidas edulcoradas y una gran cantidad de edulcorantes puede ser debido a otros factores.
El factor que puede ser clave para esto es la selección de alimentos, cuando nosotros ingerimos edulcorantes nos estamos acostumbrando a ese sabor dulce, y es difícil, al igual que con el exceso de sal, el consumir alimentos con menos sabor, por lo que siempre se tiende a elegir alimentos con umbrales de sabor más altos, los cuales suelen tener una gran cantidad de azúcar y grasa, por lo que el consumo de estos edulcorantes, sobre todo si es de forma excesiva, va a acostumbrarnos a ese sabor dulce y va a repercutir en la selección de alimentos que escogemos para nuestro día a día, apartando otros que serían bastante más saludables.
CONCLUSIONES Y CONSEJOS
Con este artículo no pretendo atacar a los edulcorantes y eliminarlos completamente, pueden tener su utilidad, pero depende individualmente de cada caso, en muchas ocasiones las personas que están acostumbradas a tomar grandes cantidades de azúcar, pueden sustituirlo por edulcorantes, consiguiendo de esta forma reducir drásticamente el contenido calórico de su dieta y evitar otros procesos metabólicos negativos del azúcar, y repercutir de esta forma positivamente en su salud, pero lo que no tendría ningún sentido, es que una persona que no toma demasiado azúcar empezase a consumir gran cantidad de productos edulcorados, porque en este caso por la selección que hemos comentado, y los cambios en la microbiota sí que repercutiría negativamente.
Luego tenemos otro grupo de personas que pueden ver este tipo de información y recurrir a lo que consideran más natural como puede ser la stevia, aunque me gustaría investigar más a fondo el material científico existente acerca de la stevia “y creedme que lo haré y os hablaré con mayor rigor de ello”, no olvidemos que la stevia no deja de ser un edulcorante artificial, es el e-960, una cosa es masticar una hoja de stevia y otra cosa es lo que compramos que ya está tratado, así que de natural tiene poco.
Ahora estaréis tirando todos vuestra stevia a la basura, NO LO HAGÁIS, esperad que termine y ya decidid que queréis hacer, porque si pretendéis cambiar entonces todos estos edulcorantes artificiales por otros productos como jarabe de maíz, sirope de arce, miel, azúcar moreno, no creáis que estáis evitando el azúcar, todos estos productos tienen grandes cantidades de azúcar, y deben ser consumidos con mucha moderación al igual que el azúcar.
Más adelante en otros artículos trataré más a fondo distintos aspectos acerca de edulcorantes, o de sustitutos para el azúcar, pero espero que esta visión global os haya servido de utilidad, ¿Y tú?, ¿Consumes grandes cantidades de azúcar?, ¿Sueles tomar edulcorantes artificiales?, ¿Conoces distintos métodos culinarios que te ayudan a evitar el uso de azúcar?, no olvides escribirlo en los comentarios y nos vemos en el próximo artículo, hasta luego.
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