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Estamos en Marzo, ya han pasado 2 meses y casi la mitad de otro mes, ¿Cómo van esos propósitos que se hicieron en año nuevo? ¿Continuáis? ¿Los habéis dejado ya?
Sed sinceros, paraos a pensar en qué propósitos de año nuevo os hicisteis y comprobad si realmente los habéis cumplido, los seguís cumpliendo o se han quedado atrás.
La verdad por experiencia propia y por lo que veo a mi alrededor ya se ha desinflado ese globo, ese globo que te hacía volar diciendo voy a conseguir mi objetivo este año. Sé que no ha ocurrido en todo el mundo y que muchas y muchos de vosotros seguís al pie del cañón pero no suele ser lo más común.
Y esto me lo he planteado muchas veces, porque a mi también me ha ocurrido, ¿Qué nos lleva a dejar algo que hemos empezado con tanta fuerza? Por supuesto estoy hablando de una opinión completamente subjetiva por lo que lo que podáis comentar al respecto me parece igual o más importante que lo que pueda decir yo.
Yo después de haber empezado muchas cosas que he dejado he decidido que siempre debo plantearme lo que debo hacer en cada momento, voy a explicarme.
¿A qué me refiero?
Imaginad que empieza el año, dices tengo un año por delante para conseguir esos objetivos que me estoy proponiendo, por ejemplo si es perder peso voy a comer mejor, me voy a apuntar al gimnasio, voy a ir de senderismo los fines de semana o voy a salir con la bici y antes de verano voy a estar hecho un figurin.
Está muy bien, es un objetivo muy bonito, te pones a ello, te apuntas al gimnasio, buscas mil posibles rutinas por internet, miles de dietas, incluso contratas a alguien que te haga una rutina y una dieta…
Aquí un breve inciso, porque se suele hacer eso, buscar a alguien que te pueda llevar las dos cosas, y por desgracia no hay mucha gente que esté lo suficientemente especializado en ambos ámbitos para poder hacerlo correctamente, o simplemente te hace una dieta perfecta y un entrenamiento perfecto que es lo fácil.
Entonces comienzas con ello, pero poco a poco va decayendo la energía, las primeras semanas lo cumples todo, vas todos los días al gimnasio a primera hora de la mañana, llega el fin de semana y te pones a hacer kilómetros y kilómetros con la bici, no te saltas ni un sólo día la dieta.
Pero te das cuenta que a medida que pasan las semanas hay días que estás más cansada o más cansado y nos vas a entrenar. Después de una dura semana de trabajo no te apetece coger la bici. Los compromisos te impiden seguir la dieta…
El caso es que llega Marzo y ya has dejado completamente todos esos cambios todo lo que te has prometido. Y es lógico, has ido a machete y a por un objetivo que a lo mejor no era alcanzable.
¿Cuál creo que es el problema?
Realmente creo que el problema es el hecho de no plantearte las cosas, que vas a hacer cual es el objetivo y cómo lo vas a hacer. Es decir, objetivo, qué y cómo…
Por esa razón son los tres pilares que suelo pensar siempre que hago algo, y aún así sigo fallando en ocasiones pero me va bastante mejor desde que lo hago.
Si por ejemplo quisiese perder peso tengo que ser realista, ¿Cuánto peso realmente creo que soy capaz de perder en X tiempo?
¿Qué quiero conseguir con eso?
¿Cómo voy a llevarlo a cabo?
Está claro que si vas a machete a por todo te vas a agotar antes, ya he hablado en muchas ocasiones acerca de la fuerza de voluntad, no es fácil mantenerla en un punto alto y la motivación igual.
Es preferible que seamos realistas escojamos opciones realistas y preveamos situaciones difíciles para evitar caer en picado.
Encima ahora viene la operación bikini
Y cuando de perder peso estamos hablando como hemos perdido esa energía nos tocará dentro de muy poco la operación bikini. Que vendrá después de ponernos tibios a torrijas en semana santa.
Diremos, no he cumplido nada pero tengo que llegar a verano en forma, aquí se aprovechará mucha gente prometiéndote resultado instantáneos, prometiéndote que llegaras a verano en la mejor forma física de tu vida pero sabes que lo más probable es que no sea así, de hecho es bastante más probable que te quedes a medio camino y que ni siquiera fuese posible tal cambio.
Después nos pondremos hasta arriba de helados, porque encima nos deprimirá no haber conseguir llegar en buena forma, y cervecita arriba cervecita abajo. Empezará septiembre y haremos un pequeño cambio pero no tan grande, que llega el frío simplemente para que las navidades no sean tan duras y recuperemos en ellas lo que perdamos ahora.
Y volvemos a cerrar el ciclo, un ciclo que nos va a hacer más mal que bien. Y pensar que si en vez del todo o el nada fuesemos poco a poco llevaríamos un año haciendo las cosas medianamente bien y con resultados mucho mejores que los actuales…
Resumen
Planteemos bien nuestros objetivos, no pretendamos hacerlo de golpe, seamos sinceros con el esfuerzo que podemos hacer, y no nos pasemos tres pueblos haciendo mil cambios que no son viables.
Sólo de esa manera mantendremos a largo plazo un cambio que requerirá mucho más que tres meses a tope. ¿Se puede en tres meses incluso en menos aprender lo necesario para hacerlo a largo plazo? Si, se puede, pero no se puede conseguir el objetivo en ese tiempo y eso es lo importante.
Así que muchas gracias por estar un día más al otro lado y nos vemos mañana con más y mejor. ¡Hasta luego!